Desde el Colegio de Enfermería de Málaga, bajo la representación de su presidente José Miguel Carrasco Sancho, quieren expresar su más enérgica condena y preocupación ante el lamentable episodio de violencia contra un enfermero, dos técnicos auxiliares de enfermería (TCAE) y un celador del Hospital General, ocurrido en el Hospital Regional de Málaga en la madrugada del jueves al viernes, 1 de marzo de 2024.
En esta ocasión, dos mujeres, tras un altercado previo en una discoteca, arremetieron física y verbalmente contra cuatro profesionales de Urgencias del mencionado hospital. Este acto de agresión no solo dejó a uno de nuestros compañeros con una uña arrancada y a varios otros con múltiples arañazos, sino que también resalta una problemática sistémica que merece una atención inmediata y efectiva.
Como ha puesto de relieve José Miguel Carrasco, presidente del Colegio, “la violencia en el ámbito sanitario es un fenómeno alarmante y que no puede ser tolerado en ninguna circunstancia. Los profesionales de enfermería y demás trabajadores de la salud dedican sus vidas a brindar cuidados y asistencia a quienes lo necesitan, y es inaceptable que se vean expuestos a situaciones de riesgo y violencia mientras desempeñan su noble labor”.
Además, cabe destacar que, desde el Colegio de Enfermería de Málaga, se ha instado en repetidas ocasiones a la Delegación de Salud y Consumo en la provincia a convocar mesas de trabajo específicas para abordar la creciente problemática de las agresiones a profesionales sanitarios en nuestra provincia. “Lamentablemente, hasta la fecha, no se ha recibido respuesta por parte de las autoridades competentes. Desde finales del año pasado, esta preocupación ha ido en aumento, evidenciando la necesidad urgente de implementar medidas efectivas para garantizar la seguridad de nuestros profesionales y el adecuado funcionamiento de los servicios de salud en Málaga” ha explicado el representante de las enfermeras malagueñas.
En este contexto, desde el Colegio de Enfermería de Málaga reafirman su compromiso absoluto con la seguridad y el bienestar de todos los profesionales de enfermería y del ámbito sanitario en general. “Es imperativo que se tomen medidas concretas y efectivas para prevenir y abordar este tipo de comportamientos violentos, tanto a nivel institucional como en la concienciación y educación de la sociedad en su conjunto” ha añadido Carrasco Sancho.
Por todo ello, se suman a la exigencia de una respuesta contundente por parte de las autoridades competentes. “Es fundamental que se implementen políticas y protocolos de seguridad que protejan a los trabajadores de la salud y que se garantice una atención adecuada y segura para todos los pacientes”.
Desde el Colegio de Enfermería de Málaga se comprometen a seguir colaborando activamente en la promoción de medidas preventivas y en la sensibilización sobre esta problemática. Además, continuarán brindando apoyo y asesoramiento jurídico a los profesionales afectados por situaciones de violencia en el ejercicio de su profesión. “Instamos a las autoridades sanitarias, a los organismos competentes y a la sociedad en su conjunto a trabajar de manera conjunta y coordinada para erradicar la violencia en los centros de salud y garantizar un entorno seguro y respetuoso para todos los profesionales de la salud”.
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